las lágrimas,
la lluvia,
entrelaza los hemisferios,
se roba las caricias,
y hoy somos más humanos
de lo que jamás fuimos,
será que padecemos el delirio del poeta,
la esclavitud de las letras,
y fluye la sangre tinta desempolvando las lenguas...
Será que los caminos se han hecho sus verjas,
y las plantas sus semillas,
o es el sol que se esconde tras la luna
haciendo castillos de hielo,
mientras juega con la marea alta:
¡Cuántas imposibilidades!
Como aquella donde siempre recargamos nuestros cuerpos desnudos,
soñados,
imaginados o deslavados por el tiempo,
ese futuro inalcanzable
de tan pensado,
ese presente lleno de contradicciones pasadas,
de pronombres salvados,
donde yo no se transforma en tú...
Será que somos fantasmas,
reencarnaciones desdibujadas,
reencontradas,
aparecidas,
somos novela,
o sólo historia entrelazada...